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martes, 22 de septiembre de 2015

LA LLEGADA A CASA DE UN PERRO

Uno de los momentos más emocionantes y bonitos de nuestra vida es cuando nuestro nuevo amigo canino llega a casa por primera vez. Todos los que hemos vivido esta experiencia la recordamos con mucho cariño y felicidad.
Pero para que sea un gran momento debe ir precedido de unos preparativos muy importantes:
  •     En primer lugar, el punto más importante, es conocer al animal que formará parte de nuestro hogar. Es fundamental entender su fisiología y su comportamiento natural para poder ofrecerle una buena calidad de vida a nuestro lado. Por ello es primordial informarse sobre el lenguaje canino, los hábitos caninos, los cuidados veterinarios, etc. En el siguiente enlace obtendrás información interesante sobre los CUIDADOS DEL PERRO
  •   Decidir el perro que más se adapte a nuestra forma de vida y a nuestra personalidad. Por ejemplo: si vives en un piso, trabajas gran cantidad de horas y no te gusta hacer deporte, no te recomiendo adoptar un Border Collie, en tu caso sería más recomendable una raza mucho menos activa. Realizando este TEST DE COMPATIBILIDAD sabrás serás feliz junto a tu perro ideal.
  •    Si tenemos una familia, decidir entre todos las funciones de cada miembro respecto al perro y establecer un horario de actividades. Por ejemplo: el pequeño de la familia ayuda al cepillado después de hacer los deberes y ayuda a mamá a ponerle de comer por la mañana y por la noche. Papá y mamá se turnan para pasearlo tres veces al día.
  •    Establecer, entre todos, las normas de convivencia. De tal forma que toda la familia sea consecuente con lo acordado y actúe de igual forma en las diferentes situaciones. Por ejemplo: si se decide que no se le ofrece de comer en la mesa, bajo ningún concepto, nadie le puede dar comida estando sentados en la mesa.
  •    Preparar la casa para que sea un lugar seguro. Ponte en su lugar, por un momento metete en la cabeza de un perro, pienso como lo haría él (e incluso adquiere su postura, para ponerte a su altura corporal). Ahora, paséate por casa ¿Hay algún cable eléctrico que pueda morder? ¿Se puede lesionar en algún agujero del jardín? ¿Es peligrosa la barandilla del balcón? ¿Hay algún producto de limpieza o alguna planta que pueda ser ingerida?, etc. 
  •    Planificar unos días sin trabajo ni obligaciones para poder acompañar a tu amigo canino en sus primeros días en su nueva vida, cuanto más tiempo pases a su lado, mejor vínculo afectivo se establecerá ya que tendréis la oportunidad de conoceros mejor y adaptaros más rápidamente el uno al otro. 
  •      Conocer el historial previo del animal:

            En el caso de que sea un cachorro: cual es su alimentación, cómo es su carácter con su madre y hermanos de camada, etc.
E          En el caso de que sea un perro adulto: dónde ha vivido antes, cómo reacciona ante los niños/ hombres/ mujeres, cuál es su reacción con otros perros, cómo es su carácter, etc.
  •      Preparar todo lo que necesita:

Un comedero y un bebedero (si es cachorro, preferiblemente no de plástico porque puede entretenerse mordiéndolos)
Una cama confortable, en un lugar tranquilo, pero no aislado.
Juguetes adaptados a la edad y al tamaño del perro. Por ejemplo: los cachorros prefieren aquellos juguetes que alivien el dolor de encías, en cambio un perro adulto se entretiene mejor con un juguete que le haga pensar. ¿quieres saber más sobre el juego canino? Sigue este enlace: EL JUEGO
Collar/ arnés, correa, cepillo, galletas para perro, pienso, etc.

Ya ha llegado el gran momento, nuestro amigo canino llega por fin a casa… ¡QUÉ NERVIOS!
Este es un punto clave en nuestra relación con nuestro nuevo amigo canino. En este momento debemos hacer un gran esfuerzo por nuestra parte y permitir que el perro explore su nuevo hogar libremente, sin agobiarlo con abrazos o gritos o besos. El olfato es uno de los sentidos más desarrollado del perro, a través de los olores son capaces de reconocer y conseguir información sobre quien ha estado y lo que ha ocurrido en ese lugar. Ten paciencia, obsérvalo y disfruta de verlo actuar de forma natural. No fuerces la interacción, si él te busca y te pide que juegues o le acaricies entonces si puedes demostrarle lo feliz que eres por tenerlo en casa, pero de forma calmada. Los gritos y los movimientos bruscos pueden llegar a asustarle.
Los primeros días serán muy estresantes para el perro, ya que su entorno ha cambiado completamente. Por ejemplo, los cachorros son separados de su madre y sus hermanos y todo lo que han conocido hasta el momento desparece. Si adoptas un perro adulto, también tienes que tener en cuenta que un cambio de entorno (aunque sea  a mejor) es una situación que desorienta al animal.

Por ello debemos crearle un entorno agradable y lo menos estresante posible:
  • »  Consigue un trozo de tela o algo que huela a su madre y hermanos o su anterior casa. Un olor familiar reducirá sus niveles de estrés.
  • »  Existen productos que favorecen un ambiente agradable para el perro, se tratan de las feromonas sintéticas basadas en la feromonas naturales que liberan las perras mientras amamantan a sus cachorros. De venta en centros veterinarios (adaptil)
  • »   Los dos o tres primeros días, aunque se haga sus necesidades dentro de casa o haga algo no deseado, se aconseja no regañar, ya que el animal necesita un periodo de adaptación para conocer las normas de nuevo hogar. Los castigos pueden hacer que no se establezcan unos vínculos afectivos de calidad entre los miembros de la familia y el perro. Una vez que se haya adaptado a su nueva rutina es el momento de comenzar su educación, mediante refuerzo positivo (galletas para perro, caricias, halagos, juego…) aplicado inmediatamente después de la conducta deseada, se obtiene unos resultados más sólidos y efectivos que con técnicas educativas basadas en el castigo.
  • »   Es posible que las primeras noches se muestre nervioso y llore, es normal, está lejos de lo que hasta ese momento era su hogar. Se recomienda prepararle una zona que entienda el perro como “refugio”, por ejemplo, el transportín. Ya que dentro de un “refugio” el animal se sentirá más tranquilo. Si el animal se acostumbra a dormir en un transportín en un futuro no le importará dónde se encuentre su transportín ya que será un lugar seguro allí donde esté, será su dormitorio. La mayoría de los consejos sobre la primera noche de un cachorro tan sólo son mitos, como ocurre con el reloj de “tic-tac” que imita al corazón de la madre, tan sólo es un sonido constante que termina por aburrir al animal y con suerte se queda dormido.
  • »   Establece una rutina de horarios de comidas, salidas, juegos, descanso… cuanto más rutinaria es la vida de un perro más seguro se siente, porque sabe cuándo va a ser la próxima vez que comerá o podrá descansar.
  • »   Desde el primer momento que llega a casa le estamos enseñando las normas de su nuevo hogar, en ocasiones incluso sin darnos cuenta. Por ello es muy importante que desde el principio seamos consecuentes y constantes. Por ejemplo: si no nos gustaría que en un futuro el perro se suba al sofá, no podremos subirlo aunque sea muy pequeñito, porque de esta forma el perro entendería que “lo normal” en casa es subirse al sofá y cuando no le permitamos subirse porque haya crecido no entenderá el cambio y será complicado educarlo. 
  • »  Adaptarlo de forma progresiva a las salidas. Inicialmente se recomienda separaciones cortas dentro del hogar, impidiéndole la entrada a determinadas zonas de la casa, aumentando poco a poco el tiempo. Una vez que el perro no muestre signos de nerviosismo en estas situaciones, se pueden comenzar las salidas progresivas a la calle. Siempre muy poco a poco, para evitar que el animal realice una asociación negativa y se adapte correctamente a estar solo en casa. De esta forma evitaremos el síndrome de ansiedad por separación, tan frecuente en la actualidad. 


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